Toda mujer ama verse coqueta y una de las formas más usuales que una mujer siempre tiene para verse bella en todos los sentidos es pintarse las uñas.
Existen muchos colores para darle un toque diferente a las manos, desde los claros y brillantes, hasta los oscuros y opacos que ensamblan la moda y la elegancia.
Sin embargo, quienes viven pintándose las uñas también deben saber que hay ciertos errores comunes que se suelen cometer y que proceden a dañar todo el decorado de ellas, inclusive pueden llegar a dar el efecto contrario en la manicure, respectivamente.
Por ello, antes de que vayas a hacer un desastre con tus manos ten la precaución no cometer estos errores y haz que el acabado que dejes sea completamente hermoso y bien visto.
Contenido
Errores que no debes hacer al pintarte las uñas
No batir el esmalte
Este es uno de los errores que se cometen con frecuencia, ya sea por el apuro o porque no conoces bien acerca de lo que esto significa para un buen resultado.
Antes de pintar la primera uña, cuida que hayas movido el esmalte con fuerza. A veces gran parte de ellas tienen dentro una bola metálica, la cual sirve para tener mejores efectos cuando se baten y así tengas la consistencia deseada en la pintura.
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Si no haces esto la consistencia excesivamente espesa solo dejará una masa sobre la superficie de tus uñas y tendrás que volver a empezar.
No cambiar la pintura frecuentemente
Mientras más tiempo tenga la pintura sobre tus uñas, más consecuencias va dejando en el color natural de las mismas.
Por lo general, si dejas el esmalte más de 15 días en tus uñas, verás que al quitarla el color natural de base será amarillo y esto no es más que el descuido por todos los componentes que el esmalte contiene y que hay que cambiar constantemente.
Pero si esto ya lo tienes de costumbre, llegará un momento que las uñas se mancharán de amarillo permanentemente. Cambia la pintura semanalmente, 15 días ya sería el límite.
No aplicar una base
Antes de aplicar cualquier pintura de uñas, es imprescindible que coloques una fina capa de brillo en la uña. Esto ayudará a que estas se manchen o cambien hacia un color natural amarillo.
De esta forma, este producto va ayudando a que el esmalte que pretendes aplicar se adhiera correctamente, no solo para no manchar la uña permanentemente sino también para que la manicure llegue a durar mucho más tiempo de lo que pensabas.
Utilizar un esmalte viejo
Normalmente, cuando los esmaltes ya han pasado su vida útil suelen volverse muy espesos y es así como debes rehusarte a utilizarlo.
Cuando aceptas aplicarte un esmalte con una consistencia muy espesa, solo dejarás un acabado desagradable sobre las uñas, además que tardarán más en secarse haciendo que tengas mil veces más posibilidades de dañarlas en cualquier movimiento.
Cuando esto pase y quieras devolverle un poco la consistencia más líquida, añádele dos gotas de acetato de isoamilo y verás cómo te durará un poco más.
No ablandar las uñas
Antes de que empieces a pintar tus uñas con cualquier esmalte, es imprescindible que ablandes la superficie y puedes hacerlo remojando tus manos con agua tibia durando alrededor de 10 minutos.
Ablandarlas previamente hará que sean más fáciles para cortar y posteriormente para limarlas, dejándoles la forma que más te gustan. Una vez que estén suaves, será mucho más sencillo cortar las cutículas y dejar el borde perfecto para que el color de pintura que utilices vaya resaltando.
No olvides aplicar brillo al final, es lo que consolidará la pintura a la superficie de la uña.